jueves, 27 de noviembre de 2008

Un club es una sociedad

Recientemente leía la nota de John Castillo, en el diario La Verdad, sobre el futuro del UAM y sus argumentos principales era la necesidad de mercadear y de crear socios. En él se habló de la importancia de vender mercancía y otro periodista, Daniel Fleitas, decía que en Venezuela no se está listo para el sistema de socios de otros países.

La realidad indica que el futbol venezolano sigue estando en pañales. Medidas y contramedidas se aplican a paso de morrocoy y, rara vez, funcionan correctamente. Es cierto lo que se dice en el artículo, el público venezolano no está listo para un sistema de socios en un club del fútbol local.

PERO, cuando está una sociedad lista para una ruptura de paradigmas? Yo me atrevería a decir que jamás.

Los cambios disruptivos, la transformación de hábitos y la ruptura de las estructuras mentales de las sociedades nunca son fáciles para asumir, por eso su carácter impactante. Las grandes teorías académicas, las más celebradas invenciones de la humanidad y los revolucionarios descubrimientos de las ciencias siempre son recibidos con escepticismo y hasta rechazo, y con toda razón: están atacando radicalmente los fundamentos que tomábamos por verdades, nos obligan a mirar más allá de lo que creemos conocer y nos retan a ver el mundo de una forma distinta.

Entiendo el planteamiento del Sr. Fleitas, pues la apatía nacional por este deporte es, muchas veces, tan abrumante que es digna de estudio. El problema es ese mismo, que se debe estudiar.

Mi hipótesis personal es que en nuestro país estamos acostumbrados a ser receptores, a vivir siempre bajo una sombra y esperar el regalo y el nuevo héroe que nos salvará, pero también creo que esto se debe porque es muy conveniente tener a la gente así. Crear una cultura de participación, de promover el cuestionamiento y de educar para tener cruces de opiniones que puedan llevar a nuevos consensos más elevados que el pensamiento de un solo hombre o mujer asusta a algunos, porque se estaría diciendo que el poder y las grandes ideas están en la gente y no en los puestos de la concepción que hoy en día le damos a la palabra “líderes”.

De acuerdo con ese modelo, la opinión del Sr. Fleitas es correcta, pues los seguidores del Unión no estamos listos para un sistema de socios traído de culturas más arraigadas en una historia futbolística más longeva que la nuestra. Simplemente no funcionará, porque no es nuestra.

Para el éxito de esta idea es necesario el análisis, el estudio y la traducción:

• El análisis de quién es verdaderamente el ciudadano venezolano con relación al fútbol y, con esto no me refiero a suposiciones superficiales pensadas obvias, sino al estudio científico (sociológico, psicológico y económico, entre otras) del venezolano y este deporte.

• El estudio de lo hecho hasta ahorita por las instituciones a escala mundial y también regional, qué han hecho, qué ha funcionado, qué ha fallado y por qué.

• Y la traducción de modelos foráneos, la famosa ‘tropicalizacion’ de conceptos, porque somos una sociedad diferente, con diferentes realidades en todas las partes de la pirámide de Maslow que otras sociedades latinoamericanas y hasta venezolanas. Somos un pueblo propio y con una gran celebración de una idiosincrasia tan bella y distintiva que ¿por qué hemos de obviarla en el diseño de un club que nos debe representar?

Más fuerte aun debe ser el llamado por un modelo de identidad propia cuando ese mismo modelo argentino y uruguayo frecuentemente se ha visto en jaque en los últimos años con una crisis económica siguiendo una crisis social, obligando el replanteamiento de los cimientos de dichas culturas futbolísticas en la actualidad. Y también debe considerarse que inclusive en otras fronteras pensadas más evolucionadas y estables, los clubes afrontan realidades económicas que obligan pensar que un ‘corta y pega’ de modelos ajenos no sería beneficioso para nosotros.

Habiendo planteado todo lo anterior, es claro que el ‘mercadeo’ puede ayudar a la solución. Pero de por sí solo, y bajo la concepción que se tiene de él, no.

Esto debe ir más a la raíz, desde la identidad del club como organización, no sólo la difusión y orquestación de actividades promocionales y comerciales. Como hice referencia antes, un mero estudio de mercado no bastará si aspiramos a un futuro de constante crecimiento e innovación. Debe ser una parte del plan, pero no toda la estrategia.

Y para mi, la clave radica en el verdadero análisis de la palabra ‘socio’. La Real Academia Española define a la palabra ‘socio’ de dos formas:

socio, cia. (Del lat. socĭus).

1. m. y f. Persona asociada con otra u otras para algún fin.
2. m. y f. Individuo de una sociedad, o agrupación de individuos.

Por lo tanto, para que exista un socio, debe haber una sociedad y un fin. Entonces la concepción del socio sólo como una cantera de dinero para financiar las actividades del club es una malformación de la verdadera esencia de la palabra. El poder de ella radica en verdaderamente construir una sociedad dentro del club, con voz y voto sobre la dirección de este hacia un fin, un propósito, un objetivo que los unifique y motive constantemente a crecer.

Para ello es necesario entablar una verdadera discusión sobre quién es el club como sociedad, qué se quiere lograr con su funcionamiento y cómo se puede lograr esto. Esto sólo se conseguirá cuando haya dialogo, cuando se invite al fanático, a gran escala, a participar en la formación de estos conceptos. No es en vano que aquello que sirve como vinculo tangible entre un ‘socio’ y una ‘organización’ se llama ‘acciones’, potenciado aun más con su contraparte en la lengua inglesa ‘share’ (del verbo compartir).

Hace meses leí un libro que, en las vísperas de su centenario, hablaba de la historia de San Lorenzo de Almagro. La parte que realmente me cautivó, fueron los primeros capítulos, cuando hablaba de sus orígenes. Personajes daban testimonios sobre lo que significaba participar de actividades deportivas, culturales y sociales en los alrededores del complejo deportivo, hablaban de los fuertes nexos de comunidad que se forjaban y solidificaban a San Lorenzo como una sociedad repleta de identidad.

Para ir hacia el futuro, debemos regresar al pasado. Hoy en día, la realidad de ese club y el futbol mundial es diferente, pues se ha concebido a los clubes como negocios que incluyen una sociedad. Creo firmemente que debe ser al revés, una sociedad que incluye al mundo de los negocios.

Yo quiero ser socio del club Unión Atlético Maracaibo. Yo quiero formar parte de ese foro de opiniones que le dará forma a un proyecto, compartir mis ideas y sentimientos, generar acciones que ayuden a acercarnos a los propósitos que nos tracemos (que, conociendo a la gente de mi bella ciudad, serán grandes y admirables) y estoy dispuesto a aportar dinero, bien sea humildemente, para ello.

Y, tu?

Exprésate por acá o por acá.

3 comentarios:

Jorge Romero dijo...

Claro q si! Tremenda nota, Grande Loloy.

Jose Leonardo Caldera dijo...

Felicitaciones mi hermano asi es q es atacando el problema de raiz ... te doi la razon en todo y bueno hay q empesar a dar idea y en lo personal estoi deacuerdo con el cobro de entrada q no genera mucho pero es algo ... por algo hai q empesar saludos y sigui ase

JAVIER URDANETA dijo...

MUY DE ACUERDO. Y QUISIERA REFORSAR AUNQUE NO SE PUEDA MUCHO. YO SOY ESTUDIANTE DE INGENIERIA DE PETROLEO EN LUZ. Y YO COMO MUCHOS ESTUDIANTE Y SEGUIDORES DE ESTE GRAN EQUIPO. SENTIMOS UNA GRAN PREOCUPACION SOBRE LA SITUACION ACTUAL DEL UAM. PERO SOLO NOSOTROS ´´EL FUTURO´´ Y QUIENES HANSEGUIDO DESDE SUS INICIOS AL BICO Y TAMBIEN QUE RECIENTEMENTE SE UNE A ESTA GRAN GAMA DE AFICIONADOS ROJIAZULES. PODEMOS SACAR ADELANTE A ESTE EQUIPO QUE TANTAS ALEGRIAS NOS HA DADO.
ESTA SEMANA EN VISPERAS DEL JUEGO COMTRA EL ZULIA. EMPEZE A ESCRIBIR EN LOS PIZARRONES, EN PUPITRES Y A TRAVES DE ESTE GRAN MEDIO QUE TANTOS BENEFICIOS NOS PUEDE DAR.INVITACIONES PARA EL JUEGO VAYAN A QUIEN VAYAN ES LO QUE NUESTRO FUTBOL NESESITA QUE LA GENTE VAYA AN LOS ESTADIOS SIN DISTINSION POLITICA SOLO POR EL ESPECTACULO. SE QUE NO ES MUCHO VINIENDO DE UNA PERSONA Y QUE RECIBI GRAN MASA DE RESPUESTAS DE PERSONAS QUE NUNCA VAN AL ESTADIO PERO APOYAN A ESTE CLUB.
PERO SI NO FUERA UNA Y FUERAMOS 50, DESPUES 100, DESPUES 500, QUE GRAN PUBLICIDAD. LO QU QUIERO DECIR ES QUE SI NOSOTROS MISMOS ESTEMOS DONDE ESTEMOS, USEMOS EL MEDIO QUE USEMOS, HICIERAMOS LA PUBLICIDAD Y CADA UNO APORTARA SU GRANITO VERIAMOS GRANDES RECONPESAS EN EL FUTURO.

Y QUE IMPORTA QUE COBREN ENTRADAS. NO COBRAR LO QUE HIZO FUE DAÑAR LA CONECCION DE LAS PERSONAS CON EL EQUIPO. EN EL SENTIDO DE QUE AL PASAR DEL TIEMPO FUERON PERDIENDO EL SENTIDO DE PERTENENCIA QUE ES TAN IMPIRTANTE Y QUE TANTO NECESITAMOS EN ESTOS MOMENTOS.